Galápagos Conservancy

Tecnología al Servicio de la Conservación: el Uso de Rastreadores Satelitales de Animales en Galápagos

El Uso de Rastreadores Satelitales de Animales en Galápagos
El guardaparque Joan Solórzano instala un dispositivo satelital en una tortuga en el sur de Isabela para registrar su posición y movimientos. ©Galápagos Conservancy

En Galápagos Conservancy, nuestro firme compromiso con la protección de los ecosistemas únicos de Galápagos se refleja en la integración de las tecnologías más avanzadas. En esta serie sobre innovaciones en tecnología, destacamos cómo los rastreadores satelitales están revolucionando la conservación de las tortugas gigantes, un grupo de especies emblemáticas y clave para la dinámica de los ecosistemas terrestres del archipiélago. Estos dispositivos de última generación fortalecen nuestra capacidad para entender la historia natural y proteger estas majestuosas criaturas, proporcionando datos esenciales que fundamentan nuestras acciones para contribuir a su conservación y manejo.

La Revolución del Rastreo Satelital en la Conservación

Los rastreadores satelitales han marcado un hito en la forma en que monitoreamos las especies en peligro. Con dimensiones compactas (5×5 cm) y un peso ligero (200 gramos), se adhieren a los caparazones de las tortugas adultas sin afectar su bienestar. Equipados con un chip de sistema de posicionamiento global (GPS), registran la posición de una tortuga cada seis horas y envían las coordenadas vía satélite. Esto nos permite rastrear sus movimientos en tiempo real y recopilar datos detallados sobre su comportamiento y patrones migratorios.

Un ejemplo destacado de la aplicación de esta tecnología en nuestro programa de conservación es el caso de Diego, la famosa tortuga gigante. Desde su liberación en la isla Española en junio de 2020, después de más de 80 años en cautiverio, el rastreador GPS en el caparazón de Diego ha permitido a nuestros científicos monitorear su adaptación y garantizar su bienestar sin interferir en sus actividades naturales. La historia de Diego ejemplifica cómo los rastreadores satelitales enriquecen nuestra comprensión del estado y el destino de los animales individuales.

Otro ejemplo del impacto de esta tecnología proviene del estudio de las tortugas gigantes en el volcán Wolf, en la isla Isabela. El monitoreo de múltiples tortugas durante dos años reveló que los machos recorrieron hasta 20 kilómetros y alcanzaron altitudes de hasta 1.200 metros, mientras que las hembras tendieron a permanecer a altitudes más bajas, entre 800 y 900 metros, con menor movilidad.

Estas observaciones ponen de manifiesto las diferencias de comportamiento entre los sexos y resaltan cómo el cambio climático podría modificar sus rutas migratorias, afectando su salud y supervivencia.

Esta tecnología avanzada optimiza el monitoreo al reducir la necesidad de la presencia física de nuestros técnicos y científicos en hábitats sensibles, asegurando que los animales y sus entornos no sean perturbados. A medida que cambian las condiciones ambientales, esta tecnología no solo facilita la creación de estrategias de conservación basadas en evidencia, sino que también permite realizar ajustes oportunos, garantizando que dichas estrategias sigan siendo sólidas, adaptables y efectivas.

Además de proporcionar información valiosa sobre las migraciones estacionales de las tortugas gigantes, los dispositivos de rastreo han destacado el importante papel de estas en la dispersión de semillas a lo largo de Galápagos. Al retener las semillas que consumen en sus tractos digestivos durante casi un mes y moverse lentamente hasta 1 km por día, las tortugas contribuyen significativamente a la dispersión lenta y constante de semillas por las islas. Este proceso es crucial para la regeneración y salud de la vegetación, promoviendo así la diversidad vegetal en los ecosistemas únicos de Galápagos.

Desafíos y Futuro de la Conservación

El Uso de Rastreadores Satelitales de Animales en Galápagos
El Dr. Washington Tapia, nuestro director general, coloca con cuidado un dispositivo de rastreo satelital en una tortuga en el volcán Alcedo, asegurando un monitoreo preciso para su protección. ©Galápagos Conservancy

Los rastreadores satelitales se han convertido en herramientas esenciales para ayudarnos a comprender la vida de las tortugas gigantes que viven en áreas vastas, remotas y de difícil acceso, que presentan enormes obstáculos logísticos para realizar monitoreos en el terreno. La naturaleza aislada de estos ecosistemas exige un esfuerzo continuo y una planificación meticulosa para asegurar su protección.

El futuro de la conservación en Galápagos depende de la integración continua de tecnologías avanzadas y del firme apoyo de nuestros donantes y simpatizantes. Su compromiso es crucial para proteger este archipiélago único y asegurar que la dinastía de las tortugas gigantes de Galápagos se mantenga para las generaciones venideras.

Próximo Artículo: Ciencia Aérea para la Conservación

En nuestro próximo artículo de la serie, exploraremos las ventajas del uso de drones para la conservación en Galápagos. Estos dispositivos están revolucionando el monitoreo en áreas de difícil acceso, ofreciendo nuevas oportunidades para la protección de la biodiversidad única del archipiélago.

El Uso de Rastreadores Satelitales de Animales en Galápagos
El Dr. Washington Tapia junto a Diego, la tortuga liberada en 2020 en la Isla Española, que lleva un rastreador GPS para monitorear su adaptación y bienestar en su hábitat natural. ©Galápagos Conservancy

Parte de la serie: La Tecnología al Servicio de la Conservación

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